Finalmente el gobierno dio marcha atrás en torno a la normativa dirigida hacia un alza exagerada del impuesto predial. Muchos porcentajes se pusieron de manifiesto. Mientras unos decían que nos íbamos a un alza del 20% el Ministerio decía que ésta solo sería del 10%. Pero otras más preocupadas voces hablaban por ejemplo de un incremento del 64.70% en San Juan de Lurigancho, de 19.37% enh La Molina, 16.78% en San Borja y 36.51% en Miraflores.
Ahora, el tope será de 6%, según el ministro Dumler, debido que se volverá a la metodología tradicional retirando del cálculo al valor del terreno.
El retroceso del gobierno sobre un tema que indudablemente iba a ser un tema de campaña electoral, se vio plasmado en una norma legal que suspende las resoluciones 287 y 299 hasta el 30 de octubre del 2016.
En las actuales de desaceleración económica hubiera sido un contrasentido que el gobierno insistiera en la aplicación de las normas suspendidas, aparte que, exigir el pago predial con un valor comercial añadido, puede resultar injusto en los casos en los que un inmueble no tiene un uso comercial.
