martes, 14 de julio de 2015

IRÁN Y GRUPO G+1 LLEGAN A UN ACUERDO

   FIN DE SANCIONES ECONÓMICAS A IRÁN CON RESTRICCIONES A SU PROGRAMA ATÓMICO Y A SU PODER MILITAR



  Irán y los cinco miembros del Consejo de Seguridad de la ONU   alcanzaron un acuerdo el  martes 14 que hacen posible el levantamiento de las sanciones a Irán a cambio de restricciones e inspecciones de su programa nuclear.  Tanto así que Irán tendrá límites en el enriquecimiento de uranio y en el de otros aspectos relacionados con el mismo.  Al país persa no se le podrá vender equipo atómico sensible por 10 años; el embargo de la Onu sobre armas convencionales se  mantendrá por 5 años  y   las sanciones sobre   las tecnologías de misiles no se levantarán en los próximos ocho años.  Si Irán viola el acuerdo entonces las sanciones serían restauradas dentro de los 65 días.
Irán ha acordado también firmar un protocolo adicional del tratado de no proliferación que permitirá un monitoreo más estricto por parte de los inspectores de la Onu  sobre las minas de  uranio, uranio crudo y las líneas de centrifugado, durante 25 años.
  Pero hay otras sanciones que sí se levantarán, primero provisionalmente y luego en forma definitiva.    De tal forma que quedaría sin efecto el  embargo de petróleo en el sistema bancario,  incluyendo el descongelamiento de 100 billones de dólares en fondos. Se descongelarán las cuentas de Irán en el extranjero impedidas de efectuar transferencias a  bancos iraníes, excepto aquellas sospechadas de ser  fondos relacionados con el financiamiento de grupos terroristas.
¿Qué gana Occidente con el acuerdo? Entre otras cosas la posibilidad de incluir a Irán dentro de la esfera de negocios occidentales y salen de una situación de clara inestabilidad internacional.
¿Qué gana Irán con el acuerdo? Gana un evidente alivio a su situación económica. Esto ya de por sí es inestimable. Pero además gana el derecho a utilizar la energía atómica, dentro de ciertos límites, que Irán -por supuesto- aprovecha para decir que se ha reconocido completamente su carácter pacífico. No hay manera de que no lo sea. 
El programa nuclear iraní comenzó en los años 50 del siglo pasado con apoyo occidental, pero luego de instalada la república islámica tal  apoyo paulatinamente  se convirtió  primero en temor y luego en abierta hostilidad. 
¿Y el petróleo? Con un productor más en el mercado, el precio del oro negro  no parece tener buenas perspectivas.