El
PBI de India en el bienio 2016-2017 alcanzaría el 7 %, mayor al que se estima
para China de 6.1%. Su tasa
de crecimiento promedio, de 5.8% entre 1980 y el 2015, le ha significado alcanzar un PBI per cápita de 6,209 dólares,
que representa el 43.8% de China. Esto además le ha permitido reducir la pobreza en más de 135 millones de
personas (desde el 2002 a la fecha según el Banco Mundial).
Por
el contrario, China – afirma César Peñaranda, director ejecutivo del IEDEP (1) –
ha ingresado a una etapa de menor crecimiento.
Así por ejemplo, mientras que en el 2015 el PBI de China se
proyectó en 6.8, para este año el crecimiento esperado es de 6.3%, lo que constituye una de las tasas
más bajas desde 1990. Y lo peor es que valores similares se repetirán en 2017, pues estará en el orden del 6%.
Esta
situación es contraria a la conseguida entre 1980 y 2015, donde China tuvo un
crecimiento ininterrumpido con una tasa promedio de 9.3%. y con un PBI per
cápita, medido en términos de paridad de poder de compra, de 309
a 14,190 dólares en dicho periodo.
Pese
a sus problemas, actualmente China contribuye con el 13.4% de la producción
mundial, es el principal exportador y segundo importador del mundo y además uno de los principales mercados para nuestros productos tradicionales.
Con respecto a India, aun
cuando es apreciable y positiva su situación en cuanto a su crecimiento, este país no está exento riesgos porque –advierte el IEDEP- tiene que
lidiar con un déficit fiscal alto (7.2%) y una deuda que representa al 65.3%
del PBI.
(1)
el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (Iedep)