El precio del petróleo puede llegar tan bajo como a 20 dólares por barril si es que la reducción de la producción petrolera no se hace con rapidez. Y si tal precio se llega a hacer realidad, no será por alguna actitud conspirativa de la Fed norteamericana, como algunos se esfuerzan en ver, sino por el exceso en la oferta del petróleo que hay en el mundo. La OPEP, organización creada por un grupo de países para proteger su recurso natural y conseguir un precio que los beneficie, ahora hace todo lo contrario, porque según Goldman Sachs, este grupo, que suministra cerca del 40 por ciento del crudo mundial, ha producido por encima de su cuota de 30 millones de barriles por día durante los últimos 15 meses, y además se prevé que Arabia Saudita, Irak e Irán impulsen aun más el crecimiento de la oferta de la OPEP. Y aún más: Irán se ha comprometido a aumentar la producción en 1 millón de barriles al día, una vez se eliminen las sanciones. En tal caso este país buscará recuperar su perdida cuota de mercado.
Según analistas del Goldman, el mercado del petróleo tiene un exceso de oferta mayor de lo que esperaban y por tal razón pronostican que el excedente persistirá en el año 2016.
Por tal razón el análisis del Goldan Sachs está centrado en países "no Opep". En ese sentido, afirma que para acabar con el superávit mundial en el cuarto trimestre de 2016, la producción de Estados Unidos tendría que disminuir en 585.000 barriles por día acompañada de otra producción no OPEP que caiga en alrededor de otros 220.000 barriles por día.
Los inventarios de crudo de Estados Unidos siguen siendo alrededor de 100 millones de barriles por encima de la de cinco años promedio de temporada.
Los analistas del Goldman Sachs dicen seguir considerando al esquisto de EEUU como la fuente probable a corto plazo del ajuste de la oferta. Y respecto al esquisto se ha dicho una y otra vez que lo que Arabia Saudita y otros países de la OPEP en realidad pretenden con la saturación del mercado, no es otra cosa que arruinar el negocio del esquisto.